Uno de los primeros episodios que influyeron en el devenir histórico de los países hispanoamericanos sin duda fue la Revolución Mexicana de 1910 a 1917, una guerra civil que provocó la muerte de miles de personas que, cantando La Adelita, regaron con su sangre los campos de batalla. Francisco I. Madero, Venustiano Carranza, Francisco Villa, Emiliano Zapata y Álvaro Obregón, son algunos de los héroes de carne y hueso convertidos por la elegante prosa de Martín Luis Guzmán (1887-1976) -naturalizado español en 1924, condecorado por el ejército mexicano con la Medalla al Mérito Militar en 1968- en coloridos personajes de libros, mitad novela, mitad ficción, como El Águila y la Serpiente, Memorias de Pancho Villa y La Sombra del Caudillo.
Ahora que en México se conmemora el centenario del ejército «constitucionalista» (antes tuvimos el «Virreinal», las huestes Insurgentes, el ejército Trigarante, el ejército Conservador, el ejército Liberal y el Federal, de don Porfirio y Victoriano Huerta, llamado jocosamente de los pelones), no debemos olvidar a Martín Luis Guzman, quien partícipe de los hechos, se convirtió en el Bernal Díaz del Castillo de la Revolución Mexicana. Este autor -cuya lectura de sus obras hoy recomendamos- es dueño de una exquisita y depurada prosa que alcanza alturas insospechadas a las que no llegan, con toda su brillantez y maestría, Alfonso Reyes, Octavio Paz y Carlos Fuentes. Dejo aparte a Juan Rulfo. La vida de Martín Luis Guzmán estuvo cincelada por la guerra, la política, el periodismo, la literatura y la libre empresa.
La Sombra del Caudillo es su obra más polémica, pues en ella desnuda la corrupción de militares y políticos al fin de las hostilidades revolucionarias que llegan a las peores bajezas con tal de asumir el control político del país y en la que el llamado «Manco de Celaya», es exhibido como un típico tirano latinoamericano que, discípulo de Maquiavelo, hace cualquier cosa por alcanzar el poder, conservarlo y, sobre todo, perpetuarse en la embrujada silla del águila. Hay una muy buena edición de esta obra de Guzmán, me refiero a la publicada por ALLCA XX, COLECCIÓN ARCHIVOS. y en cuanto a sus obras completas no omitimos recomendar la del Fondo de Cultura, aunque un poco cara para el bolsillo de un estudiante.
Si nos está leyendo un joven español o hispanoamericano que desea abrazar el sacrificado oficio de las letras, estimamos que debe poner entre sus pendientes de lectura las obras del maestro mexicano Martín Luis Guzmán.
Matías Antonio Ocampo Echalaz